Descendientes de Colonos Italianos celebraron un nuevo aniversario de Capitán Pastene

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Como se ha hecho tradicional, el pasado sábado 9 de marzo tuvo lugar en la localidad de Capitán Pastene (IX Región) la “carretada” con que los descendientes de los colonos celebran el arribo a estas tierras de los primeros italianos que llegaron a establecerse a un territorio desconocido, en el que de acuerdo con lo planteado por el agente colonizador Giorgio Ricci, se les entregaría un terreno, algunos animales y herramientas necesarias para establecerse en estas alejadas tierras, donde sólo la carreta y el caballo eran el único medio de movilización.

Como en muchas de estas empresas, hubo desacuerdos, problemas, sufrimientos, penurias y desencantos, que hoy, a pesar del tiempo transcurrido son recordados por descendientes de segunda, tercera o cuarta generación, como parte del futuro incierto que tuvieron que vivir aquellas personas trasplantadas desde la lejana Europa a los faldeos de una entonces casi desconocida cordillera de Nahuelbuta.

Habiendo pasado ya más de un siglo de esos años difíciles, sus descendientes recuerdan mediante una “carretada”, el inicio de la vida en los sectores aledaños a este pueblo que fuera creado posteriormente con el apoyo tenaz y decidido de toda la colonia.

Fue así como alegremente se vistieron con los trajes de época que incluyen: suspensores, gorros y chalecos, los hombres; mientras que las mujeres lucieron hermosos trajes largos, sombrillas, chalas y echarpes de antigua data.

En las carretas se transportaba de un “cuantuhay”, desde catres, maletas, herramientas y todo aquello que trajeron los colonos para subsistir en un medio difícil como eran estas tierras, mientras viejas acordeones tocaban sentidas melodías que eran voceadas por todos los viajeros.

Así, en un desfile de sana alegría donde campeaban las banderas italianas, la larga comitiva hizo su recorrido por las principales calles del pueblo, arribando finalmente al sector de la sagra, frente a la Parroquia San Felipe Neri, en cuyos escalones se tomó a tradicional fotografía que gran cantidad de ciudadanos y turistas trataba dejar grabada en sus cámaras y teléfonos celulares.

Finalmente la concurrencia tuvo oportunidad de disfrutar de los mejores platos italianos preparados especialmente para la ocasión, acompañados de una oferta de pastelería, dulces, productos de la estación como miel, piñones y la infaltable chicha de manzana, cuya molienda se efectuaba en el mismo lugar y las botellas eran llenadas “al pie de la prensa”, para satisfacer la sed de los sedientos viajeros.