
Gracias a las faenas de restauración se pudo descubrir en presbiterio de la Iglesia de los Sagrados Corazones de Valparaíso, la alternancia de colores verde, burdeos y dorado, que estaban ocultos bajo una capa uniforme de pintura café claro.
Las características decorativas, que incluyen figuras como rombos y flores de lis, son similares a las que presentan las columnas del retablo policromado que está sobre el altar y que fuera confeccionado por artesanos belgas en el siglo XIX. También son parecidas a la pintura del cielo estrellado de la bóveda del templo.
Esto lleva a pensar al rector de la iglesia, presbítero Sergio Pérez de Arce, que la pintura ahora redescubierta es de autoría del escenógrafo ítalo-francés Alejandro Boulet, contratado en 1873 para las pinturas interiores del recinto religioso. «Él trató de mantener el mismo estilo del retablo. Pero estas decoraciones se eliminaron por dificultad de mantención», dijo.
El hallazgo fue realizado por la arquitecta de la constructora, Ilen Sáez, al percatarse de que el sellante acrílico aplicado sobre las paredes del templo dejaba traslucir dibujos de las capas más profundas. La restauración consiste en reparar grietas y fisuras ocasionadas por el 27-F, limpieza de la fachada y recuperación de la pintura interior.
Las obras de restauración fueron encargadas por la congregación de los SS.CC. a la constructora Fabbro, con un costo de $233 millones, financiados por la entidad religiosa y el Programa de Apoyo a la Reconstrucción del Patrimonio Nacional del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.
La congregación de los SS.CC. fue la primera en llegar al país tras la Independencia y en 1868 comenzó a construir el actual templo, cuya arquitectura mezcla los estilos neorrománico y neogótico. Desde 2003 es monumento nacional en categoría de Monumento Histórico.
Fuente: El Mercurio, valpoiglesias.blogspot.com/